Si crees que el tequila solamente sirve para enfiestar rápido o para ser bien mexicano el quince de septiembre, entonces esta guía es para ti, pues aunque no lo creas, el tequila es uno de los mejores destilados del mundo, tan apreciado como los grandes whiskeys y los coñacs más finos.
Sigue leyendo para aprender lo básico para saber beberlo, escogerlo y disfrutarlo.
¿Qué es el tequila?
El tequila es una bebida alcohólica mexicana que se elabora a partir de la destilación del agave tequilana. Tiene alrededor de 38 grados de alcohol.
¿De dónde viene el tequila?
El tequila es, originalmente, del Pueblo Mágico de Tequila, Jalisco. Aunque se ha popularizado con el paso de los años, por su denominación de origen, el tequila solamente puede producirse en Guanajuato, Michoacán, Nayarit, Tamaulipas y Jalisco.
¿De qué tipos de tequila hay?
Blanco
Color: transparente
Añejamiento: se envasa tras la destilación
Notas (aroma): agave, cítricos, miel y flores
Reposado
Color: dorado a cobre
Añejamiento: dos meses a un año
Notas: agave y madera
Joven u oro
Color: ámbar pálido
Añejamiento: combinación de tequila blanco y reposado
Notas: caramelo, agave y roble
Añejo
Color: ámbar
Añejamiento: uno a tres años
Notas: roble y chocolate
Extra-añejo
Color: ámbar
Añejamiento: al menos tres años
Notas: caramelo, vainilla, roble
Reserva
Color: miel
Añejamiento: más de ocho años
Notas: roble, agave, frutas secas, café y cacao
Si quieres saber con qué alimentos combinarlo, échale un ojo a este artículo.
¿Cómo reconocer un buen tequila?
En el mercado hay una enorme oferta de tequila, pero como abundancia de resacas lo han comprobado, no todas las marcas son buenas.
Lo primero que hay que buscar es que sea puro. Es decir, que sea 100 % agave tequilana weber, para evitar que contenga otro tipo de azúcares. El tequila mixto está hecho de entre 50 % y 60 % de agave y el resto es jarabe de maíz o caña de azúcar.
Un buen tequila no sabe “a alcohol”, sino que tiene un sabor que, aunque intenso, no quema.
Al verlo a contraluz, no debe tener ningún sedimento o partículas suspendidas
Al girar el vaso o la copa, las paredes deben cubrirse de modo uniforme y luego caer en forma de canales. No debe haber burbujas o gotas.
¿Cómo tomarlo?
Solito: En principio, un buen tequila se toma solo y a temperatura ambiente. Si no estás acostumbrado al sabor, puedes tomarlo con un chaser de agua natural o mineral, Así se deben tomar los tequilas añejos y extra-añejos.
Con limón y sal: Así como la sal potencializa los sabores, el limón los oculta. Es una buena opción si estás tomando uno de mala calidad.
Con sangrita: esta bebida muy típica tiene como base jugo de tomate y salsas picantes. Su función es limpiar el paladar con cada sorbo y reducir el ardor que puede causar el destilado.
En banderita: con limón y sangrita, cada uno en un caballito distinto. Es una opción popular con tequila blanco.
En coctel: Ahora que, si lo tuyo, lo tuyo, son las margaritas o los charros negros, nadie te va a juzgar. Eso sí, no te preocupes demasiado por la pureza, pues aunque la diferencia en sabor será mínima, el precio cambiará significativamente.
Es muy importante tomarlo a sorbitos y no de golpe, a menos que no quieras acordarte al día siguiente.
Si lo vas a tomar con alimentos, usualmente se toma el blanco como aperitivo, por sus notas ácidas; el reposado con el primer tiempo, por sus notas amaderadas; y el añejo con los platos fuertes.
¿Tiene algún beneficio?
Si lo tomas con moderación, puede ser muy bueno para la salud. En principio, ayuda a reducir el nivel de azúcar en la sangre, reduce el colesterol, mejora el flujo sanguíneo, tiene pocas calorías, es tranquilizante (insistimos, ¡en cantidades moderadas!) y te ayuda a dormir.
Y ahora que eres todo un experto en tequila –o simplemente se te antojó-, te invitamos a brindar con nosotros y disfrutar de cualquier tequilita de José Cuervo, garantía de tradición, sabor y ¡salud!
Artículo original en ABC del tequila: Guía para principiantes de Travel Report.
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